y yo no sigo el ritmo. Todo ha pasado en un abrir y cerrar de ojos. Y me he apagado. Sin luz. Fuera del mundo. Me encuentro vacía, triste y sin encontrar sentido a nada. Me han reventado por dentro. Y eso es más difícil de solucionar a que te peguen una paliza. En menos de un año he perdido más que he ganado. He perdido autoestima (la poca que tenía), la ilusión por todo lo que me rodea. Sé que me toca empezar desde cero y estoy sola. Porque lo poco que tenía que me hacía seguir también se ha marchado. Y ya no hay nada más que hacer. Me he cansado de seguir. Ojalá todo vuelva a ser bonito pronto, mientras tanto, me gustaría aprender a cuidarme.
